Open banking, el camino al futuro

Ya es un lugar común señalar que la pandemia por Covid-19 aceleró todos los procesos de digitalización en el mundo. Estamos en medio de la cuarta revolución industrial y esta no se detiene. También es cierto que los efectos y consecuencias de los desarrollos tecnológicos no impactan de igual manera a nivel internacional, sino a medida que los ciclos de reactivación económica comienzan a agilizarse en cada región.

En el centro de este torbellino de cambios se encuentran ideas clave para el futuro de la finanzas como lo es la banca abierta (“open banking” en inglés). Según señala el BID, la banca abierta es un modelo que permite a los proveedores de servicios externos acceder a datos financieros de instituciones financieras a través de API, y está creciendo rápidamente debido a tendencias globales y la sed de innovación en la región. Las API permiten que las aplicaciones y los lenguajes de software se comuniquen entre sí. En la práctica, un cliente podrá acceder a varios productos financieros, con menores comisiones, ofrecidos por diferentes proveedores, a través de una aplicación. Al compartir datos, los bancos pueden ampliar el alcance de los clientes, acelerar la adopción de nuevas tecnologías y crear nuevas fuentes de ingresos.

Alvaro Perez Uz


Entonces, la banca abierta propone la apertura e intercambio de información, tanto individual como agregada, entre entidades financieras. Por un lado, esta diseminación de datos supone una mayor competencia entre intermediarios; por el otro, busca que, en la medida que se amplíe la documentación de cifras y patrones, se podrán desarrollar más y mejores productos y servicios, así como ofertas personalizadas, que correspondan a las necesidades de cada usuario.

Finder encuestó a 41.654 personas de 30 países, y los resultados revelaron que uno de cada tres adultos tendrá una cuenta bancaria digital en 2026.

La transición a este modelo requiere de la intersección de tecnología y asesoría financiera que es desarrollada constantemente por empresas fintech. De acuerdo con Finerio Connect, empresa mexicana de open banking, México comienza a convertirse en líder en servicios financieros de este tipo en Latinoamérica. Su posición en la punta de la lanza no es fortuita. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadìstica y Geografìa (INEGI), sólo 47% de la población tiene acceso a una cuenta de banco; en ese contexto, los productos de banca abierta permiten democratizar el acceso a este tipo de instrumentos.

La apertura de información que brinda la banca abierta es la puerta a un futuro financiero más práctico y seguro basado en datos y herramientas tecnológicas para hacer mucho más sencillas algunas acciones, que van más allá de abrir una cuenta de banco. Algunos de estos beneficios: 

  • Mejor conocimiento de usuarios y clientes potenciales,
  • Automatización de procesos de Know Your Customer (KYC)
  • Creación de nuevos productos y servicios,
  • Reducción de costos al utilizar infraestructura de terceros,
  • Expansión y fidelización de la base de clientes,
  • Nuevos modelos de negocio,
  • Reducción de fraudes.

“El desarrollo de soluciones tecnológicas ayuda a empoderar a diferentes personas y negocios, no solamente instituciones bancarias. De igual manera, las empresas obtienen beneficios, pues el libre tránsito de datos derriba barreras que impedían el ejercicio de dinámicas más saludables, sencillas y asequibles”, sostiene Nick Grassi, Co-CEO de Finerio Connect.

El COVID-19 ha acelerado la demanda de innovación por parte de los bancos y ha llevado al cuestionamiento del modelo de banca sucursal. El suministro de soluciones innovadoras está impulsado por un sólido ecosistema fintech: en Latam atrajeron US$1.200 millones de capital de riesgo solo en el primer trimestre de 2021. Y el número de fintechs ahora asciende a 2.300, según el último informe que publica el BID con la colaboración de Finnovista.

En definitiva, la banca abierta es quizás la promesa de un futuro financiero que marchará hacia la personalización de los servicios adquiridos por los usuarios. Así, cada vez son más las empresas que suman herramientas de banca abierta a sus estrategias comerciales. Ésta es la transformación hacia la experiencia del usuario-empresa con modelos novedosos, accesibles y funcionales.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Más sobre redes, protección de datos y gigantes tecnológicos.

Cómo ser una empresa responsable. La visión de Paul Polman

El lunes negro del conglomerado Facebook-Instagram-Whatsapp